Un paseo por el Ciutat de València en su 50 aniversario

En el verano de 1970, las grúas tomaron el césped del Antonio Román. Inaugurado  el 9 de Septiembre del curso anterior, se iniciaron las labores de implementación de la cubierta, la cual ha acabo por convertirse en un auténtico símbolo del Ciutat de València.

Primero fue una superficie que había que domesticar. Había que imaginar el estadio. Después se colocaron las cimbras y más tarde fue surgiendo la forma colosal del actual Ciutat de València. La imagen trata de condesar esa secuencia en la construcción del coliseo granota.

Un coloso a la conquista del barrio de Orriols. La instantánea muestra la amplitud de una instalación que se inserta en el barrio de Orriols. La Tribuna, la Grada Central y la Grada de Alboyara piden paso de forma majestuosa. Al fondo es posible contemplar el edificio de San Miguel de Los Reyes.  

La imagen permite comprobar la evolución constructiva de la actual Tribuna del Ciutat de València. El contraste es más que evidente. Cincuenta años distancian una misma secuencia. Una vez construido el estadio se alzó la cubierta. Es posible incluso rastrear la publicidad de los primeros tiempos.

Samaranch visitó las obras del Ciutat de València en 1968. Estellés, arquitecto encargado de las obras de la instalación, ejerce de anfitrión. Jugando con el pasado y el presente. Imaginamos la escena con el Ciutat tal y como se puede observar en el tiempo presente.

La Grada Central del Ciutat de València como podía vislumbrarse hace cincuenta años ya con las torres de luz. Su imagen contrasta con la riqueza cromática de la Grada de Alboraya con la rana corporativa del presente. Al fondo es posible imaginar la icónica silueta del Edificio ARENA.

Un mismo Ciutat con atmósferas que contrastan. La ambientación permite recrear el paso del tiempo. La Tribuna actual entra en contradicción con la sobriedad  del primer Ciutat. Son escenarios distintos. Desde la luz hasta las formas de riego para preservar el césped. 

Nos divertimos con la Tribuna Central del Ciutat rasgando los márgenes del tiempo. Imaginamos la visión actual de la zona más noble de la instalación, con el rico colorido que caracteriza ese espacio, sin la techumbre que la distancia del cielo que entroncaría con la primera visión del estadio.

Os proponemos ejercitar la imaginación para recordar el momento en el que Antonio Román encendió la luz del Ciutat. Según las imágenes que tenemos se produjo en la Tribuna Central. Situamos al presidente azulgrana en el Palco de Autoridades tal y como se contempla en la actualidad.

Los cambios urbanísticos acaecidos en las últimas décadas han acabado por integrar al Ciutat de València en la trama urbana. Los recuerdos y vivencias relacionadas con la presencia de un estadio aislado y exento de otras edificaciones aún perdura en la memoria de muchos levantinistas.  

Levante 1909. Es la leyenda que aparece en la Grada Central del Ciutat desde la última remodelación. La imagen fusiona dos mundos alejados. En primer plano; el espacio que comprende la salida de los jugadores al terreno de juego desde el vestuario.

El estadio es contemplado desde el césped, en el que unos pocos privilegiados tienen la oportunidad de ser visionados por miles de almas que animan al unísono. El Ciutat estaba preparado para albergar distintas gestas, aunque el término de su construcción aún no había llegado.