Calleja debutó en la jornada decimosegunda del curso 22-23 con una victoria ante el Ibiza (1-2). Atrás quedaban dos triunfos enlazados con Miñambres como inquilino eventual del banquillo. El colectivo azulgrana giró en la tabla para encaramarse en la zona elevada. El ascenso directo se escapó tras detentar la tercera posición. En la promo de ascenso el Levante doblegó al Albacete para caer de forma cruel ante el Alavés en el Ciutat en el último suspiro. Comenzó el ejercicio 23-24, pero Miñambres tomó el relevó en el tramo final de la campaña.

Fue el entrenador escogido para la temporada 2002-2003. El Levante regresaba a la categoría de Plata tras una dilatada estancia en la elite y el objetivo marcado por la sociedad azulgrana planteaba el desafío de retornar a la Primera División con la mayor celeridad posible. La exigencia era máxima. El Levante mantuvo el grueso de la plantilla que había competido en la principal categoría. El técnico fue preso de un arranque liguero dubitativo. En la novena jornada fue destituido.

Permutó el filial por el primer equipo como relevo de Pereira. Alessio Lisci conformaba un perfil valorado por la cúpula directiva de la entidad. Su experiencia en la Ciudad Deportiva avaló su llegada al banquillo. Llevaba una década ascendiendo escalones por las categorías menores del fútbol azulgrana hasta alcanzar el Atlético Levante tras despuntar en el Levante División de Honor. En ese periplo acumuló títulos y prestigio. Pese a que el Levante mejoró sus prestaciones con el técnico italiano no pudo alcanzar la permanencia en la elite.

Sustituyó a Paco López en octubre de 2021. Pereira había sido segundo técnico de Juan Ignacio Martínez los cursos 2011-2012 y 2012-2013. Debutó ante el Getafe en el Ciutat (0-0). Su último partido fue ante el Betis (3-1). Dirigió siete encuentros con un saldo de tres empates y cuatro derrotas. A finales de noviembre de 2021 fue destituido.

Cambió el filial, líder en Tercera, por el primer equipo para extraer unos números majestuosos en los últimos once partidos. Fue en marzo de 2018. Firmó ocho victorias, dos derrotas y un empate. Certificó la permanencia como en los ejercicios 2018-2019, 2019-2020 y 2020-2021. Alcanzó las semifinales de la Copa del Rey en el curso 2020-2021. Su relación acabó en la jornada 8 de la temporada 2021-2022.

El reto no era sencillo. Había que regresar a la elite tras un traumático descenso. Atrás quedaba la mejor racha en Primera División tras seis campañas enlazadas. El resto es historia. El Levante de Muñiz, líder incuestionable, cantó el alirón seis semanas antes del fin del curso 2016-2017. En el ejercicio 2017-2018, después de un arranque notable, fue sustituido por Paco López.

A finales de octubre de 2015 el Consejo de Administración apostó por Rubi (Joan Francesc Ferrer Sicilia) como recambio de Lucas Alcaraz al frente del banquillo azulgrana. Era su estreno en la elite. Pese a la atractiva propuesta táctica que el preparador catalán defendía, el Levante no consiguió conquistar la permanencia en el universo de la Primera División.

Aterrizó en los días finales de octubre de 2014 como relevo de Mendilibar con la misión de reconducir una difícil situación deportiva. El equipo granota fondeaba en la tabla tras un arranque repleto de aristas. Logró que el Levante cumpliera la quinta temporada consecutiva en Primera. En la temporada 2015-2016 abandonó el club en la jornada novena tras una derrota ante la Real Sociedad.

Mendilibar fue el técnico escogido para la dirección del Levante del curso 2014-2015. Se acentuaba de su figura su experiencia en el universo de la máxima categoría en clubes de un perfil similar al equipo granota. Con una calidad humana incuestionable, el proyecto que lideró quedó rasgado en la octava jornada de la competición tras una derrota casera ante el Real Madrid.

Su llegada a la entidad planteó un cambio en el modelo establecido en la dirección técnica. La experiencia era un aval que sobresalía en el currículum que identificaba a Joaquín Caparrós. Curtido en mil batallas, era uno de los técnicos en activo con más partidos en la elite. Su estancia en el Levante, curso 2013-2014, significó la consolidación del equipo en el marco de la Primera División.

Juan Ignacio es quizás el conductor del mejor Levante de la historia. Lo atestigua la estadística y la sexta posición en Primera División del curso 2011-2012. Ese hito dimensionó al Levante a la Liga Europea que disputó en el ejercicio 2012-2013. Tras superar la fase de Grupos y eliminar a Olympiacos el equipo cayó en la ronda de octavos de Final.  

Fue el inicio de una nueva era. Luis García recaló en el club en el traumático verano de 2008 para fijar las cimbras de un proyecto que trasladó al Levante desde la categoría de Plata hasta la Primera División en el ejercicio del centenario (2009-2010). Construyó un equipo de autor muy reconocido. Fue una continuada sucesión de emociones en tres cursos sobresalientes.

Fue el tercer entrenador del ejercicio 2007-2008. Vinculado a la sociedad granota, cogió el banquillo para reemplazar a Di Biasi. El tiempo se agotaba. Afrontó las semanas finales del calendario liguero en Primera. Los problemas deportivos y económicos se multiplicaron para consumar un descenso anunciado.

Sucedió a Abel Resino y permaneció veinticinco jornadas al frente del banquillo del Levante en un curso de sentido tortuoso. No finalizó la campaña deportiva. Rescindió su contrato en la jornada trigesimosegunda, tras una victoria ante el Betis (0-1), para regresar a Italia tras el compromiso alcanzado con el Torino.

Fue el relevo de López Caro en el ejercicio 2006-2007. En su tercer partido como técnico granota mancilló los muros del Bernabéu para conquistar una victoria legendaria (0-1). Un explosivo final de Liga, con cuatro victorias en seis partidos, garantizó la permanencia. En el curso siguiente, 2007-2008, marchó del club en la séptima jornada.

Llegó al feudo de Orriols avalado por su excelente trabajo desarrollado en la cantera del Real Madrid. Las coordenadas estaban fijadas; mantener al Levante en su vuelta a Primera División en el curso 2006-2007. En enero de 2007 abandonó el banquillo azulgrana. El fin del primer tramo de la competición estaba muy cerca.

Permutó el filial, que militaba en Segunda B, por el banquillo del primer equipo para afrontar los últimos cuatro partidos del curso 2004-2005 en el ámbito de Primera División. Fue el relevo de Schuster. El descenso no impidió que liderara el proyecto del curso 2005-2006. No obstante, cedió su plaza a Mané en la décima jornada del ejercicio liguero.

Fue el tercer técnico de la historia granota en Primera. El curso 2004-2005 fue discordante. El Levante pisó posiciones de Liga Europea en el tramo inicial de la competición tras vencer al Athletic en el Ciutat (1-0). El rendimiento del bloque fue decayendo después. La dolorosa derrota ante el Málaga (0-1) fue el epílogo.

Manuel Preciado conquistó el ascenso a Primera División cuarenta años después. Palabras mayores para un técnico idolatrado por el levantinismo militante por su talante y por su personalidad. El curso 2003-2004 fue excelso con el Levante siempre en zona de ascenso. El sueño se materializó en Xerez el 5 de junio de 2004.

Concluyó el curso 2001-2002. Los 50 puntos firmados no salvaron al Levante de un descenso no consumado en los despachos. El ejercicio 2002-2003 fue antitético. Situó al Levante líder de la tabla, pero fue destituido en la jornada trigesimosexta tras la derrota ante el Córdoba (1-2).

Nexo de unión entre la salida de Balaguer y la llegada de Cantarero en el curso 2001-2002, logró un triunfo en Murcia (0-1) y una derrota ante el Atlético de Madrid (2-4). En la campaña 2002-2003 participó en los seis choques que cerraron la competición sustituyendo a Cantarero.

El Levante del ejercicio 2000-2001 alcanzó la octava plaza en la tabla. El bloque azulgrana firmó tardes espléndidas sobre el verde como la victoria ante el Atlético de Madrid (4-1). Al equipo le penalizó el exceso de empates (21). Inició el proyecto del curso 2001-2002, pero fue destituido en la décima jornada.

Finiquitó el curso 1997-1998. El Levante consumó el descenso. No obstante, retomó la categoría de Plata en la campaña 1998-1999. En el retorno, 1999-2000, firmó un curso notable. En el ejercicio 2001-2002 volvió al banquillo entre las jornadas catorce y vigesimocuarta.

José Enrique Díaz y Roberto Álvarez pasaron por el banquillo antes de la llegada de Aranguren. Fue el cuarto técnico. La temporada 1997-1998 se consumía y el Levante seguía aletargado en la tabla. Dirigió nueve partidos con un saldo de dos triunfos, dos empates y cinco derrotas.

Fue el primer entrenador de un ejercicio funesto marcado por la sucesión de cinco técnicos. Estuvo las tres primeras jornadas del curso 1997-1998 saldadas con idéntico número de derrotas. El Levante cayó en la primera ronda de la Copa del Rey ante el Novelda.

Estuvo en dos etapas distintas al frente del banquillo. En el curso 1996-1997 completó una campaña notable en el regreso del Levante a Segunda A. En la décima jornada del ejercicio 2005-2006 retornó a Orriols para suplir a Oltra con el objetivo de alcanzar el ascenso a Primera División. Lo logró tras vencer al Lleida en la última jornada.

A la tercera fue la vencida. El Levante de Carlos Simón puso rumbo a la categoría de Plata en la temporada 1995-1996. El equipo se proclamó campeón del Grupo III de Segunda B y acabó con las aspiraciones del Córdoba, Avilés y Racing de Ferrol en la promoción.

La estancia de Juande Ramos siempre estará asociada al registro de las trece victorias enlazadas en la epifanía del ejercicio 1994-1995. El equipo lideró la clasificación en el Grupo III de Segunda B en la competición regular, pero no coronó el éxito en la promoción.

Reanimó a un bloque que había perdido la fe en el triunfo. Su presentación fue exquisita con cinco triunfos encadenados. El final del curso 1993-1994 fue explosivo. El Levante disputó la promoción de ascenso a Segunda A, aunque no logró el ascenso.

Abrió el ejercicio 1993-1994 con el reto de buscar la Segunda División A. En la jornada veinticinco abandonó el cargo. La derrota ante el Sant Andreu (0-1) fue el detonante. Gonzalvo fue su sustituto. Regresó al banquillo en el ejercicio 1997-1998.

Fue el tercer entrenador del ejercicio 1991-1992. Llegó con la única intención de mantener al equipo en la categoría de Bronce en una temporada titubeante. Contaba con una dilata experiencia en banquillos de superior categoría. Dejó al equipo en la zona intermedia de la clasificación.

Fue el segundo entrenador de la convulsa temporada 1991-1992. Relevó a Pepe Martínez en el banquillo y estuvo nueve jornadas al frente de la primera plantilla. Obtuvo seis empates y tres derrotas. Marchó en la jornada diecinueve. Años más tarde regresó al club para dirigir al Atlético Levante.

Fue el relevo de Dunai. Fue el segundo entrenador del curso 1990-1991. Venció al Sestao en su estreno en Orrriols (1-0). En la jornada vigésima fue destituido por Pepe Martínez que regresaba tras conseguir la permanencia el curso anterior y preparar al equipo durante el verano de 1990.

La temporada 1990-1991 arrancó con Antal Dunai en el banquillo. Fue un curso volcánico con tres entrenadores. En la jornada decimoprimera tras la derrota en Lleida concluyó su paso por el club granota. El Levante desconocía la victoria.

Cubrió dos períodos distintos. En la temporada 1988-1989 devolvió al equipo a la categoría de Plata tras coronar la tabla del Grupo IV en Segunda B. El curso siguiente, 1989-1990, fue relevado en la jornada vigesimoctava por Pepe Martínez. Dirigió ocho partidos en el funesto ejercicio 1997-1998.

El Levante apostó por Quique Hernández en el ejercicio 1987-1988. El técnico despuntaba en el fútbol valenciano y el equipo granota volvía a Segunda B. El binomio no funcionó. El empate ante el Mestalla en la jornada decimotercera supuso su final en el banquillo azulgrana. Pachín cerró el curso liguero.

Fue el recambio de Yosu Ortuondo en el banquillo azulgrana. Cubrió el tramo final del ejercicio liguero 1986-1987. Logró el objetivo trazado por el club de regresar a la división de Bronce. La reestructuración de la Segunda B en cuatro grupos propició que los cinco primeros clasificados conquistaran el ascenso de forma directa.

El Levante del ejercicio 1986-1987 en Tercera División contó con los servicios de Yosu Ortuondo. Pese a su juventud había saboreado un ascenso con el Córdoba a Segunda B. El técnico vasco fue cesado en la segunda vuelta con el equipo instalado en la zona alta. Aquel curso los cinco primeros clasificados ascendían a Segunda B.

Estuvo en dos etapas distintas al frente del equipo. En el curso 1985-1986 la reestructuración de la categoría de Bronce engulló a la entidad. Repitió en la temporada 1992-1993 con la escuadra compitiendo en Segunda División B. Estuvo vinculado a la secretaría técnica del Levante.

Fue el preparador escogido para la conducción del Levante en el retorno a la categoría de Bronce en el curso 1984-1985. Dotado de una fuerte personalidad, abandonó la entidad tras la disputa de la jornada decimoséptima. Pachín fue su sustituto.

En el ejercicio 1983-1984 detentaba la condición de secretario técnico. Permutó sus funciones para recalar en el banquillo con la temporada en marcha sustituyendo a Martínez. En su expediente no hubo espacio para la derrota. El Levante superó al Fuengirola y Orense en la promoción. Fue la guinda en el curso del 75 aniversario.

En la temporada 1982-1983 no había más retos que regresar a Segunda B. En la promoción de ascenso cayó en la primera ronda ante el Ensidesa. En el curso 1983-1984 fue cesado. Volvió al banquillo en las jornadas finales de la campaña 1990-1991 y empezó la temporada 1991-1992.

No pudo enderezar el rumbo de una entidad en constante y permanente sacudida. Fue el tercer entrenador de la agitada temporada 1981-1982 que se cerró con dos descensos. El Levante volvió a Segunda B por rendimiento deportivo y acabó en Tercera División por cuestiones económicas.  

Asociado al imaginario del club, y sempiterno colaborador, ejerció de ligazón entre Vicente Piquer y Roberto Gil. Asumió el banquillo del club de Orriols entre las jornadas tres y sexta del curso 1981-1982, con un saldo de dos victorias y dos derrotas. Fue segundo entrenador en distintas etapas y miembro de la secretaría técnica azulgrana.

El verano de 1981 fue agitado. Toza comenzó la preparación del Levante en la pretemporada, pero fue Vicente Piquer quien inició el curso. Su presencia fue testimonial en el ejercicio 1981-1982. Estuvo dos partidos ligado al banquillo azulgrana.

Rifé dirigió al Levante en las jornadas finales del curso 1980-1981 como relevo de Pachín. Fue un período de convulsión social y económica. Deportivamente el equipo fue menguando en su rendimiento. Su imagen fue asociada a la de Cruyff. Tuvo un accidente que le impidió concluir la temporada.  

Cumplió con nota en el retorno a la categoría de Plata en el ejercicio 1979-1980. La temporada siguiente, 1980-1981, situó al Levante en lo más alto de la tabla. Fue destituido en marzo de 1981 apenas unas semanas más tarde del desembarco de Johan Cruyff. Sustituyó a Carrión en el curso 1984-1985 y regresó en la temporada 1987-1988.

Sustituyó a Dauder con la temporada 1977-1978 en pleno recorrido con el Levante en la recién inaugurada Segunda B. Repitió en el banquillo azulgrana el curso siguiente en la división de Bronce. Aceptó el reto del ascenso. El ejercicio 1978-1979 significó el regreso a la categoría de Plata. Fue su último acto de servicio.

Dauder fue el primer técnico que condujo la nave granota en el marco de la Segunda División B. Fue en la temporada 1977-1978. El club se planteó el regreso a la categoría de Plata. Dauder no concluyó el ejercicio.

Dirigió 30 partidos en el ámbito de la competición en Segunda División en el curso 1976-1977. El Levante se instaló desde el nacimiento del campeonato en la zona más borrosa de la tabla. A falta de ocho partidos fue relevado por Álvaro Pérez. El equipo descendió a Segunda B.

El banquillo del curso 1975-1976 fue convulso pese al ascenso. Dagoberto Moll suplió a Daucik en las primeras semanas del ejercicio. Fue el segundo técnico, pero no acabaría una campaña que supondría el reencuentro del Levante con el cosmos de la Segunda División con Álvaro Pérez a los mandos.

Lucía un currículum impresionante. Fue el relevo de Navarro en el transcurso de la temporada 1974-1975 con el Levante en Tercera. En el curso 1975-1976 se situó al frente del banquillo tras la marcha del Che Barral antes del inicio del curso. Moll le sucedió. Se convirtió en asesor técnico del presidente Manuel Grau Torralba.

La aventura de Héctor Nuñez en el Levante no fue extensa. Dirigió once partidos de Liga entre las jornadas décima y vigésima del curso 1973-1974 en Segunda División con un balance de dos victorias, dos empates y siete derrotas. Juan Navarro fue su sustituto tras su marcha.

Cinco temporadas después del descenso a Tercera, el Levante regresó a Segunda. Fue en el ejercicio 1972-1973. Juncosa fue el entrenador de un equipo meteórico en el ascenso. Juncosa comenzó el curso 1973-1974, pero fue reemplazado por Héctor Núñez.

Mundo se comprometió con el Levante en un momento de crisis. El equipo se ahogaba en Tercera División. Fue el tercer técnico del curso 1970-1971. Roig y Balaguer fueron sus antecesores. El Levante venció al Nástic en un choque traumático con el descenso a Regional Preferente y se quedó en Tercera.

La temporada 1970-1971 resultó traumática. Roig fue el primer técnico en sentarse en el banquillo azulgrana. Roig había cerrado el ejercicio anterior. No obstante, la secuencia de resultados adversos implicó su marcha. Ramón Balaguer fue su sustituto.

La temporada 1969-1970 amaneció con Alfonso Guasp en el banquillo. El Levante inauguró el actual Ciutat de València aquel ejercicio. El reto era salir con celeridad desde la Tercera División. Alfonso Guasp no concluyó el curso ante la llegada de Francisco Roig.

El Levante retornó a Tercera y Navarro afrontó el reto del regreso en un curso, 1968-1969, disputado en Mestalla. La irregularidad de la escuadra le alejó del ascenso. Navarro regresó en el arranque del ejercicio 1971-1972. En el final del 1973-1974 y principios del 1974-1975.

Recaló en el curso 1966-1967. La escuadra mantuvo el sueño del ascenso hasta el final. Un año después, con la reestructuración de la categoría de Plata, fue relevado en la séptima jornada por Álvaro. Regresó con el ejercicio 1971-1972 en marcha como sustituto de Juan Navarro.

La excelente racha de cinco victorias consecutivas en las jornadas finales del curso 1965-1966 no significó que el Levante de Eusebio Ramón lograra el regreso ansiado a Primera División. Aquel Levante finalizó quinto.

El Levante partía con la etiqueta de candidato al ascenso a Primera en el curso 1965-1966. Benavente aceptó el desafío. Contaba con una experiencia cuantificable en Segunda, pero la derrota ante el Calvo Sotelo en la novena jornada (0-1) significó su adiós.

Aterrizó en el feudo de Vallejo en la segunda aventura del Levante en Primera División. Fue durante el ejercicio 1964-1965. Dirigió al equipo de Vallejo toda la temporada y los partidos de Copa. Sin embargo, no afrontó los dos duelos decisivos ante el Málaga por la permanencia.

Asumió el relevo de Lelé con el curso 1962-1963 en marcha. Logró el ascenso a Primera División y mantuvo al Levante en la élite en el ejercicio 1963-1964. Un año después volvió para afrontar la temida promoción de permanencia en Primera ante el Málaga con distinta suerte.

Se alabó su capacidad para sacar petróleo de plantillas ajustadas. La crisis económica azotaba al Levante. Completó las campañas 1960-1961 y 1961-1962 en Segunda con éxito. En el curso 1962-1963 abandonó el club al final de la primera vuelta en una controvertida decisión.

Cambió las botas y la batuta en la línea de medios por la condición de entrenador en las jornadas finales del ejercicio liguero 1959-1960. Fue su estreno como técnico y el principio de una productiva carrera en los banquillos del balompié español.

Fue el técnico escogido para proyectar a un grupo que buscaba el ascenso a Primera División con Joseíto como estandarte. Era el curso 1959-1960. No obstante, no finalizó la temporada.

Fue el relevo de Urquizu en el curso 1957-1958. Recompuso al Levante y soñó con el ascenso a Primera la campaña 1958-1959 con Wilkes. No dirigió la promoción ante Las Palmas. Regresó a la entidad en el curso 1967-1968 y al final de 1975-1976 y a la conclusión de 1976-1977.

Su palmarés estaba trufado de títulos tras su estancia en el Athletic Club. Mantuvo al Levante en Segunda en la temporada 1956-1957 tras sustituir a Escolá. Un curso más tarde como efecto de la riada, los resultados se torcieron y abandonó el Levante en la novena jornada.

Su primera temporada en el Levante, 1955-1956, no pudo ser más afortunada. El club regresó a Segunda División. En la temporada 1956-1957 fue sustituido por Urquizu por una inoportuna enfermedad que le impidió seguir al frente del banquillo de Vallejo.

Se sentó en la sexta jornada del curso 1954-1955 en el banquillo granota. Venció en el choque que enfrentó al Tarrasa y al Levante (1-3). No obstante, en una temporada complicada no pudo impedir el descenso a Tercera División.

Aterrizó en el Levante con el curso 1952-1953 en marcha. Una temporada más tarde, 1953-1954, logró el ascenso de la escuadra granota hasta la Segunda División. Arrancó en la categoría de Plata, 1954-1955, pero fue sustituido por Picolín en la jornada quinta.

Inició el curso 1952-1953 en el banquillo, aunque no cerró la temporada. Fue sustituido por Arnal. Histórico en el imaginario azulgrana, regresó al banquillo en diversas ocasiones como solución eventual.

Fue un caso singular ante su carácter poliédrico. Defendió el escudo del Levante, fue presidente y en la temporada 1951-1952 inició el curso alojado en el banquillo de Vallejo, aunque no concluyó la temporada ante los resultados adversos. Villagra fue su sucesor.

Jugó en el Levante F.C en los años treinta. En el curso 1950-1951 lideró desde el banquillo a un Levante que se quedó en Segunda tras promocionar ante el Tenerife. Fue el secretario técnico del primer ascenso a la elite. En el ejercicio 1970-1971 relevó a Roig en el banquillo.

Mantuvo al Levante en el universo de la Segunda División en su estreno en el curso 1948-1949. En la siguiente temporada, 1949-1950, la suerte fue distinta. Fue relevado del banquillo al final de la primera vuelta por Juan Puig.

Cerraba su carrera como jugador cuando aceptó el banquillo. Ascendió a la categoría de Plata en el curso 1945-1946 y mantuvo al Levante dos campañas en Segunda en los cursos 1946-1947 y 1947-1948. Después, fue una solución de emergencia durante el curso 1951-1952.

La prensa advirtió de una permuta poco común en enero de 1945. Rubio pasaba al banquillo del Levante mientras que su predecesor, Villanueva, se ocuparía de la preparación física. El Mago dirigió los últimos partidos del curso y una promoción de ascenso a Segunda no consumada.

Fue el entrenador escogido para la dirección técnica del curso 1944-1945. El Levante competía en Tercera División y buscaba el ascenso a Segunda. No llegó a concluir la temporada. Pasó del banquillo a ocuparse de la preparación física del equipo. Su relevo fue Gaspar Rubio.

Fue un ejemplo de promoción interna. Ascendió al Levante tras pasar por las categorías inferiores. Completó la temporada 1943-1944 y volvió a fines de la campaña 1951-1952 en busca de una permanencia que resbaló.

Las actas y el testimonio directo de alguno de los protagonistas resaltan que que dirigió al UDLG en la fase de ascenso de la temporada 1939-1940 a Primera posiblemente compartiendo labores técnicas con Juan Puig. Rozó el éxito.

Fue el primer entrenador del UDLG y se mantuvo tras la conversión en Levante U.D. En julio de 1943 Gallart anuncia en la prensa su marcha del banquillo. Estuvo cuatro temporadas. Volvió en la segunda mitad del curso 1949-1950 como solución de emergencia.

Julián Calero es el técnico escogido para la dirección del Levante 2024-2025. Su última aventura le vinculó con el banquillo del Cartagena en la Liga Hypermotion durante la pasada campaña. Con anterioridad entrenó con éxito al Burgos consiguiendo el ascenso hasta la categoría de Plata con el club burgalés. Tiene una amplía experiencia en el fútbol internacional como asistente. Fue técnico asistente de España en el Mundial de Rusia.  

Felipe Miñambres cambió los despachos por el banquillo a finales de febrero de 2024 para relevar a Javier Calleja. No era una situación nueva para el Director Deportivo de la escuadra granota que había cubierto el interregno entre la salida de Nafti y la llegada de Calleja en octubre de 2022. Miñambres dirigió 15 partidos en el marco de la Segunda División A con un balance de cuatro victorias, ocho empates y tres derrotas.