Fue el líder espiritual de un grupo que no tenía límites. El ascenso del año del centenario, el liderato en Primera o el paso por la Vieja Europa son hitos asociados a su figura. Antes asaltó los muros del fútbol profesional de la mano de Juande o Carlos Simón en el Levante de mediados de los noventa. En esa etapa cubrió la línea de medios.