Fue una de las referencias anotadoras del Levante en el arranque de los años setenta. Era un atacante racial. En el interior del área era difícil de detectar. Dominaba el juego aéreo. Fue uno de los futbolistas más utilizados por Juncosa en la temporada del retorno a Segunda División en el curso 1972-1973. Militó cuatro campañas en la casa levantinista