El delantero costamarfileño Arouna Koné ostenta un récord granota todavía imbatido: Es el máximo goleador del Levante U.D. en una temporada en Primera División. Lo consiguió en la única campaña en la que vistió la elástica azulgrana, la 2011/12, que fue, además, la mejor de las quince en las que el club de Orriols ha militado en la elite del fútbol español. Ese año el Levante U.D. acabó en la sexta posición de la tabla y se clasificó (por primera y, de momento, única vez) para disputar la competición continental de la Europa League. Los 15 goles que marcó Koné fueron claves para lograr aquella gesta.

Y precisamente este mes de agosto de 2021 se cumple el décimo aniversario de la llegada del ariete africano al decano del fútbol valenciano. Tras varias temporadas en el Sevilla, donde las lesiones siempre le habían impedido rendir satisfactoriamente, llegó cedido por el club hispalense en su último año de contrato con el club de Nervión.

Arouna Koné a su llegada al aeropuerto de Manises (Valencia) en agosto de 2011

“Quiero agradecer al Levante que me dé la oportunidad de volver a sentirme futbolista”. Con estas palabras arrancó Koné su acto de presentación como jugador granota. Cuando llegó a España, en el verano de 2007, Arouna representó el fichaje más caro de la historia del Sevilla, que desembolsó por él 12 millones de euros. El costamarfileño procedía del PSV holandés, donde ganó dos Ligas y manifestó una capacidad de desborde y una potencia física fuera de lo común. El primer año en la capital hispalense no demostró todo su valor, al anotar solo un par de goles, aunque le sirvió para adaptarse al fútbol español. Y justo al principio de la temporada siguiente, cuando todo el mundo esperaba su explosión deportiva, en un amistoso entre Costa de Marfil y Guinea, Koné sufrió una lesión gravísima: la triada, la rotura de los ligamentos internos, externos y cruzados de la rodilla. Desde aquel agosto solo disputó veintiséis partidos en cuatro campañas, ocho de ellos en Alemania, donde marcó dos goles cedido en el Hannover 96, antes de volver a lesionarse y regresar a Sevilla, donde pasó el curso 2010/11 en blanco.

Presentación de Koné como granota en el Ciutat de València

Era evidente que la apuesta que iba a realizar el club de Orriols era muy arriesgada. Pero el nuevo entrenador levantinista Juan Ignacio Martínez JIM, que venía de dirigir con gran éxito al F.C. Cartagena en Segunda División, le demostró enseguida su confianza: “Estoy encantado de su fichaje y vamos a necesitar muchas cosas de él”. Eran las inequívocas palabras del míster alicantino para apoyar sin reservas a quien quería que se convirtiera en el buque insignia de su proyecto.

El Sevilla, pese a la aciaga trayectoria del costamarfileño, quiso cubrirse las espaldas y solo permitió la cesión de su jugador con una condición: Si su delantero (que ese año terminaba su relación contractual con el club de Nervión) marcaba durante toda la temporada (entre Liga y Copa) 18 goles, quedaría automáticamente renovado con la entidad hispalense. El Levante aceptó la cláusula y así comenzó la maravillosa historia como granota de Arouna Koné.

Koné siempre destacó en el Levante por su excelencia goleadora pero, además de su gran rendimiento deportivo, dos aspectos de su imagen le hicieron muy peculiar. Siempre lució el número 2 en su camiseta (un guarismo nada vinculado a los delanteros) y a finales de la primera vuelta se tiñó el pelo de un rubio platino que le hizo inconfundible en todos los terrenos de juego

La Liga comenzó con una semana de retraso. La primera jornada (que debería haber enfrentado al Levante con el Zaragoza en el Ciutat de València el 21 de agosto) se suspendió por una huelga convocada por los jugadores de Primera y Segunda División. La Asociación de Futbolistas Españoles no había llegado a un acuerdo con la Liga de Fútbol Profesional para crear un fondo de inversión que garantizara a todos los deportistas el cobro íntegro de sus contratos. Esa jornada se aplazó hasta que concluyó la Primera Vuelta, jugándose el 22 de enero de 2012. Y a su vez la que tendría que haber sido la jornada 20 se recolocó para después de la 36.

El debut de Koné, que contaba con 28 años, se produjo en la tercera jornada (la segunda real). Tras igualar a uno en Getafe el equipo se desplazó a Santander para enfrentarse al equipo local en los Campos de Sport de El Sardinero. El marcador no se movió pese al estreno del africano y, después de dos empates consecutivos como visitante, el Levante volvió a Valencia con la mirada puesta en su siguiente rival, el todopoderoso Real Madrid.

El debut de Koné se produjo en el empate sin goles entre el Racing de Santander y el Levante del 11 de septiembre de 2011

Y Arouna no pudo tener un mejor arranque como goleador. Su gol, el único del partido, sirvió para que el conjunto granota consiguiera una brillantísima victoria frente al Real Madrid entrenado por Mourinho. El tanto del africano llegó en el minuto 22 de la segunda parte, tras una gran internada de Javi Venta por la derecha que asistió a Koné para que, este, libre de marca, fusilara a placer a Casillas en la portería de Gol Orriols. Aquel encuentro tuvo, además, un momento icónico para el levantinismo: La carrera al sprint que, con sus 36 años, el mítico Sergio Ballesteros (para muchos el mejor futbolista granota de todos los tiempos), le ganó a la estrella madridista Cristiano Ronaldo disputando un balón.

El gol de Koné le dio al Levante la victoria frente al Real Madrid por 1 a 0. Arriba celebrándolo con Ballesteros y Javi Venta y abajo nada más marcar, con la mirada perdida del abatido madridista Pepe

El Levante realizó el mejor arranque liguero de su historia en Primera División. Tras los dos empates iniciales ganó consecutivamente al Real Madrid, al Rayo Vallecano en Madrid, al Espanyol en Valencia, al Betis en Sevilla, al Málaga de nuevo en el Ciutat y al Villarreal en El Madrigal (hoy Estadio de la Cerámica). Aquel triunfo por 0 a 3 en la localidad castellonense encumbró al conjunto granota a liderar en solitario, por primera vez en su historia, la mejor Liga de fútbol del mundo. Y el tercer gol de aquel día inolvidable fue obra del costamarfileño Arouna Koné.

Tras la victoria en Villarreal por 0 a 3 (con el último tanto obra de Koné) el Levante alcanzó (por primera vez en su historia) el liderato en solitario de la Primera División. Liderato que mantuvo la jornada siguiente tras vencer a la Real Sociedad por 3 a 2, con un golazo extraordinario de Rubén Suárez en el descuento, tras ejecutar magistralmente una falta al borde del área

El único doblete que consiguió Koné como levantinista llegó en la jornada 14 (13ª real), cuando el Sporting de Gijón visitó el feudo de Orriols. El partido vino de perlas para cortar una racha de tres derrotas seguidas que llegaron tras la imbatibilidad mantenida durante los nueve primeros compromisos del campeonato. El equipo asturiano salió goleado por 4 goles a 0 y Koné se encargó de materializar los dos últimos, ambos en la segunda parte.

Koné celebrando uno de sus dos tantos en la goleada por 4 a 0 al Sporting de Gijón. Por cierto, el club norteño pasó a la historia como el conjunto más goleado por Arouna en la Liga, puesto que en el partido de vuelta les volvió a marcar por tercera vez

Su participación en la competición de Copa también fue meritoria. Disputó tres eliminatorias y marcó en dos de ellas. En la primera, además, su actuación fue determinante. En los dieciseisavos de final hubo enfrentamiento con el Deportivo de La Coruña, entonces en Segunda División (aunque acabaría campeón y volvería a Primera ese mismo año) y en la ida el conjunto gallego se impuso con solvencia por 3 a 1. La vuelta no fue nada fácil y se tuvo que disputar una prórroga para poder culminar la remontada. En ella Koné anotó el decisivo 4 a 1 que permitió avanzar hasta los octavos de final, donde esperaba el Alcorcón, que esta vez sí fue doblegado con facilidad. La andadura levantina concluyó en los cuartos, donde hubo derbi en la ciudad y el Valencia se impuso con claridad. En ese enfrentamiento Koné logró su segundo tanto copero (el africano, por cierto, le marcó al conjunto che en Liga y Copa en una misma campaña, algo de lo que pocos futbolistas granotes pueden presumir).

Y el Real Madrid también fue otra víctima doble del costamarfileño en una misma temporada, aunque solo en Liga. Porque Koné volvió a marcar al club de Chamartín en el partido que se disputó en la capital el 12 de febrero de 2012. Consiguió el segundo de los dos tantos levantinistas tras un magnífico testarazo a un centro por la izquierda del centrocampista granota Òscar Serrano.

El madridista Arbeloa trata de obstaculizar la arrancada de Koné (en el Santiago Bernabéu) ante la mirada atenta del técnico portugués Mourinho

La segunda vuelta de Koné fue todavía mejor que la primera, cuando consiguió seis goles. En la segunda parte de la temporada alcanzó los nueve y eso que, por diversas circunstancias, no jugó los tres últimos partidos del campeonato. Uno de los goles más celebrados por la afición granota fue, sin duda, el que Arouna consiguió en Mestalla para sellar el empate a uno en la vuelta del derbi. Una vez más se confirmó el dato histórico de que en ninguna de las quince temporadas en las que el Valencia y el Levante han coincidido en Primera División alguno de los dos equipos haya ganado los seis (o cuatro en el pasado) puntos en litigio. Aunque ese día a punto estuvo el Levante de conseguir el triunfo si, precisamente Koné, no hubiera desperdiciado una clarísima ocasión que tuvo a falta de seis minutos para la conclusión del encuentro.

Celebración granota en Mestalla tras el gol de Koné que supuso el empate a uno definitivo. De izquierda a derecha el costamarfileño, Xavi Torres, Barkero, Cabral, Juanfran, Pedro López, Valdo y Ballesteros. En la foto de abajo Koné, en ese mismo partido, avanzando con el balón ante la mirada de los valencianistas Mathieu y Víctor Ruiz

La jornada siguiente el Atlético de Madrid fue la nueva víctima de Koné, esta vez en el Ciutat de València. Los colchoneros, además, cayeron por la vía rápida puesto que a los diez minutos de partido el marcador ya reflejaba el 2 a 0 que iba a ser definitivo. Y el africano fue el autor del segundo tanto, tras rematar de cabeza una falta botada, de manera magistral, por Barkero.

El equipo entrenado por Simeone no tuvo ninguna opción frente el Levante de Koné. En la imagen el tanto de Arouna justo cuando el balón entra en la portería del Atlético de Madrid defendida por Courtois

A nivel deportivo, al Sevilla (club propietario de Koné) no le salió nada bien la jugada de ceder a su delantero al Levante. En la primera vuelta, precisamente el día que Ballesteros jugó su quincuagésimo partido con el Levante en Primera División, los granotes se impusieron por 1 a 0 gracias al tanto marcado por Nano, el otro central que acompañó al de Burjassot en ese encuentro. Y en la jornada 35, en el match de la segunda vuelta disputado en el Sánchez-Pizjuán, el Levante empató a uno, con gol, además, del costamarfileño. La ausencia de una cláusula que prohibiera su participación lo posibilitó. Ese resultado dejó al equipo hispalense en la novena posición de la clasificación, la misma que ocupó al concluir el torneo, lo que impidió al Sevilla disputar cualquier competición europea en el curso 2012/13.

El Levante empató a uno en Sevilla con tanto de Koné, que marcó al club que le había cedido. En la imagen inferior justo el momento en el que hizo el gol de un potente zapatazo

Y, además, finalmente, el equipo andaluz tampoco pudo retener al costamarfilense al acabar la temporada, ya que Koné no llegó a la marca de 18 goles (entre Liga y Copa) que se estableció como condición en el contrato de cesión entre el Sevilla y el Levante. En la jornada 36 el club granota venció al Granada en el Ciutat de València por 3 a 1. Koné anotó el 1 a 0 aquel día y, al quitarse la camiseta para celebrar el tanto, recibió una tarjeta amarilla que le hizo completar el ciclo de amonestaciones. Eso le acarreó un partido de sanción que tuvo que cumplir en el siguiente, que fue el encuentro aplazado de la segunda vuelta contra el Zaragoza. Arouna llevaba 17 goles durante todo el curso y quedaban dos partidos de Liga por jugar contra el Mallorca y el Athletic. Si marcaba renovaría automáticamente con el club del Guadalquivir. Si no lo hacía sería libre para fichar por quien quisiera. Y como unas molestias en la rodilla le impidieron jugar esos dos últimos encuentros concluyó su vinculación con el Sevilla y firmó a coste cero por el Levante, que justo antes de empezar la temporada 2012/13 lo vendió por cuatro millones de euros al Wigan inglés, que a su vez le traspasaría luego al Everton, también de la Premier League, por siete.

Esta acción de Koné quitándose la camiseta (al anotar el primer gol en la victoria por 3 a 1 del Levante frente al Granada) le supuso una tarjeta amarilla que le impidió jugar la siguiente jornada contra el Zaragoza. Finalmente resultó ser su último gol como granota

La excepcional clasificación final del Levante U.D. aquel curso confirmó que todo salió a pedir de boca. Y no solo por el rendimiento del goleador africano sino por el de todo el equipo, que realizó la mejor campaña de la historia del club, al acabar en sexta posición y clasificarse para jugar la temporada siguiente la Europa League. Jugadores inolvidables en el imaginario granota como Ballesteros, Juanfran, Pedro López, Iborra, Valdo, Juanlu o Barkero acompañaron a Koné aquella mítica campaña. Además, durante dos jornadas el Levante ostentó en solitario el liderato de la competición liguera, algo que también quedará para siempre en los anales del club y que seguro que se repetirá en el futuro.

Con sus 15 goles Koné es el recordman goleador del Levante U.D. en una campaña en Primera División