El Estadio de Vallejo fue durante más de cuatro décadas el corazón del levantinismo y un punto de referencia para el fútbol valenciano. El corazón del Levante, memoria y pasión granota, recuerdos del Campo de Vallejo.

La casa del Gimnástico

El feudo de la Calle de Alboraya nació en 1925. Era la casa del Gimnástico. Vallejo abría sus puertas a través del histórico Portal de Vallejo. Esa mítica construcción porticada, ubicada en la calle Bodría, se convirtió pronto en símbolo de identidad para miles de aficionados.

Aquel estreno, narrado en las crónicas de la época, marcó el inicio de un escenario que crecería al ritmo del propio club. Aquella jornada el Gimnástico y Saguntino cruzaron sus caminos en el Campeonato Regional. Diario de Valencia cinceló un estreno que marcó a los estamentos que conformaban el gimnastiquismo. 

Del Gimnástico a UDLG y Levante UD

Con el paso de los años, el corazón del Levante, memoria y pasión granota, recuerdos del Campo de Vallejo, fue testigo del nacimiento de Unión Deportiva Levante-Gimnástico. Y de la epifanía del Levante UD en 1941 y de los primeros grandes pasos de la entidad. El final de la Guerra Civil transformó el destino de la instalación,.

En este campo se libraron promociones inolvidables. Se celebró con devoción el primer ascenso a Primera División y se vivieron tardes que aún permanecen en la memoria colectiva. El corazón del Levante, memoria y pasión granota, recuerdos del Campo de Vallejo. También sufrió momentos duros, como la riada de 1957, que puso a prueba su resistencia y la de toda una ciudad.

Desde 1925 hasta 1968

Desde 1925 hasta su despedida en 1968, Vallejo fue mucho más que un estadio: fue un hogar, un lugar de encuentro y un territorio emocional donde tomó forma la identidad levantinista. Este vídeo es un viaje por aquella historia, desde el primer día hasta el último, para recordar el lugar donde empezó todo. El corazón del Levante, recuerdos del Campo de Vallejo.